Con la fase número cuatro de la intervención a este populoso sector de la ciudad, ordenada por el presidente de la República, Juan Manuel Santos Calderón, desde ayer fue erradicada la venta de estupefacientes desde los diferentes inmuebles allí ubicados.

A las 4:00 a.m. iniciaron los operativos sorpresa por parte de los uniformados adscritos a las diferentes especialidades, que se tomaron la zona para adelantar un registro puerta a puerta en búsqueda de sustancias alucinógenas, armas y para dar con el paradero de 15 personas requeridas mediante orden judicial.

Agentes de la Sijín, la Sipol, Carabineros, guías caninos, Esmad e Infancia y Adolescencia rodearon todo el sector e iniciaron una inspección minuciosa.

De acuerdo con la información suministrada por la brigadier general Mireya Cordón López, comandante de la Región Tres de Policía, el objetivo era llegar a los inmuebles que con anterioridad se habían identificado como expendios.

Indicó que de esta manera se iniciaron por allí las acciones para prevenir algún inconveniente y evitar que quienes se dedicaban a esta actividad ilícita tuviesen tiempo de esconder o deshacerse de los alcaloides.

“Ello permitió la captura no solo de 14 de los que eran buscados, sino además de otras 10 personas en flagrancia y la incautación de una gran cantidad de alucinógenos de diferente tipo”, agregó.

Precisó que es un hecho el fin de la llamada ‘olla’ de la ‘Cueva del Humo’, la más grande, reconocida y peligrosa del Eje Cafetero, debido a su composición, a la forma como operaba, a la gran cantidad de personas que tenía y al sitio donde estaba ubicada, pues ello dificultaba el acceso de las autoridades.

Llamó la atención de los miembros de la fuerza pública que además de la marihuana, la base de coca y el bazuco, se halló gran cantidad de drogas conocidas como rivotril y gotas de coquán, las cuales han tomado gran fuerza entre los consumidores y cuyas dosis se consiguen a mil pesos.

Gran parte de los alcaloides fueron ubicados gracias a la labor de los caninos expertos en el rastreo de los mismos, pues se encontraban camuflados en zonas boscosas aledañas a los inmuebles. 

“Es un parte de tranquilidad para la ciudad y para la comunidad, ya que allí se acopiaba gran parte de la droga que llegaba de otras regiones del país y luego era distribuida hacia los diferentes sectores”, resaltó la general.
Por su parte, el coronel Ángel Hugo Rojas Sandoval, comandante de la Policía en el Quindío, quien hizo un recorrido por el sector, indicó que la parte operativa culmina de esta gran manera.

Allí algunos ‘cambuches’ fueron desmontados y en adelante la alcaldía a través de las respectivas secretarías se encargará de coordinar la demolición de los que quedan, para evitar que sean ocupados de nuevo.
El alto mando sostuvo que luego de estas labores la Policía mantendrá una vigilancia permanente en la zona por medio de un plan ya establecido y así controlar las 24 horas del día el ingreso y la salida de las personas que aún habitan en zonas como el Salazar Bajo, La Múcura y la Cueva del Humo.

“La idea es que no ingresen más estupefacientes y se pueda garantizar la presencia de las demás autoridades para la parte de la intervención social, que es el paso a seguir”, dijo.

Explicó que la cadena criminal ya quedó desarticulada y que ahora viene un trabajo para ayudar a quienes tienen problemas de drogadicción, a niños y jóvenes para brindarles atención en temas de salud, educación y vivienda, entre otros, y en si para que estas familias inicien una nueva vida en un lugar digno y alejadas de la ilegalidad.

“Es satisfactorio este parte positivo cuatro días antes de que se cumpliese el plazo indicado por el presidente, pero además porque se da un importante golpe al comercio de estupefacientes, del que se derivan la mayor parte de acciones ilegales en el departamento como los hurtos y los homicidios selectivos que tanto afectan a la sociedad quindiana”, puntualizó.

De otro lado, Camilo Casadiego, director de Planeación municipal, informó que además de la parte humana se llevarán a cabo trabajos como ya se dijo de demolición de construcciones y de reforestación.

“Es fundamental recuperar la zona, pero para ello hay que analizar diversas situaciones de manera conjunta con las demás autoridades, pues existen casos en los que algunos predios cuentan incluso con escrituras”, agregó.

Precisó que estas situaciones serán analizadas para observar de donde provienen estas irregularidades y que además se coordinarán trabajos con las empresas prestadoras de servicios públicos, pues se encuentran allí redes de acueducto y energía.

“Por esto el llamado es para que estas entidades antes de llevar a cabo estas instalaciones revisen el plan de ordenamiento y así no se contribuya a que se formen estas invasiones”, explicó.

Resaltó que la idea no es atropellar a nadie, pero que todas las personas residentes en la zona deberán abandonarla, pues la mayoría fueron incluidas en planes de vivienda, pero como se pudo constatar ayer mismo se niegan a salir, porque quizá se encuentran vinculadas a actividades al margen de la ley que en otros sitios no podrán llevar a cabo.